Probablemente, has llegado a esta web buscando información sobre las semillas, la germinación de las plantas y demás. Pues bien, vamos a contarte que crear un sitio web tiene mucho que ver con la jardinería. ¿Te sorprende?

La elección del terreno para sembrar

Una vez que tienes la semilla que quieres sembrar (tu idea) tienes que elegir un terreno adecuado. En IONOS vas a encontrar el registro de tu dominio (tu parcela), un buen alojamiento web (los aperos de labranza), un diseño adecuado (¡qué bonito es tu huerto!) y una atención al cliente constante (un jardinero a tu servicio). A partir de ahí, serás tú quien tenga que poner su trabajo al servicio de cada planta. No olvides que cuantas más personas visiten tu jardín, mejor será para darlo a conocer o para vender los frutos (o productos) que vaya dando cada árbol o planta. Incluso puedes convertir tu propuesta en la mejor de tu comarca y competir con otros agricultores. ¿Entiendes ahora el paralelismo? Pues todavía hay mucho más parecido del que piensas.

¿Cómo crece tu sitio web?

Ya te hemos comentado que has de tratar tu página web como si se tratara de una semilla, pero para que crezca bien la tienes que regar con contenidos. Nadie puede saber que tienes un sitio web si no creas un contenido que interese o que responda a las preguntas de quien podría estar interesado/a en lo que haces. No caigas en el error de cortar y pegar contenidos de otro. Cada sitio web tiene unas características concretas y, al igual que sucede con las plantas, necesita cuidados distintos. Lo que sí debes hacer es esforzarte para conseguir que tus contenidos sean los más apetecibles. Trabaja duro para diferenciarte y para comentar novedades de tu nicho de mercado. Notarás cómo el tráfico aumenta.

Tras todo lo anterior luego llega la germinación. En ocasiones, puedes utilizar una campaña de publicidad (SEM) como abono, pero el tráfico generado durante la misma has de mantenerlo una vez finalizada. No olvides que tu sitio web necesita atención diaria y que si obvias sus cuidados vas a encontrarte con que va a ir perdiendo fuerza. La personalización de los contenidos, hablarle directamente a tu usuario potencial y convertir cada oferta en un acontecimiento son tácticas que ofrecen grandes resultados.

En la actualidad, la importancia de los sitios web radica en que encajan muy bien con las búsquedas que realizan miles de usuarios cada día. Organizar la exposición de cada tema, emplear fotografías de calidad, renovar el diseño y cumplir con los requisitos de los buscadores son solo algunas de las estrategias más recomendables. No pienses nunca que por tener una planta bonita y fuerte ya está todo hecho. Sigue fomentando su fortaleza y su belleza cada día con nuevas propuestas. Atrévete a ser el jardinero de tu propio sitio en Internet. Si tu idea germina vas a ser el propietario de un bonito jardín que puede ser tan divertido como rentable. ¿Te animas?

 

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